Páginas

martes, 20 de diciembre de 2011

Un hijo de Ignacio Baleztena en el destierro. Recuerdos de un día trágico XVI.



Manuscrito de la tía Lola Baleztena "Recuerdos de un día trágico"
"...Al día siguiente

            Quiso Dios, que este primer día de nuestro relativo destierro fuera alegrado por un sol magnífico.

            Empezamos todos a estremar la casa con cariño y esmero: incluso pusimos flores de espino. En estos quehaceres andábamos entretenidos, cuando recibimos aviso de Pamplona de que el Baleztenica que Carmen esperaba, impaciente por llegar al mundo y aumentar la familia, en ocasión en que tantos deseaban su desaparición, había adelantado su venida y esperaba, sano y hermoso, el ser bautizado[1].

            No era prudente que Ignacio fuera a Pamplona dada la excitación de los ánimos, así, que tuvo que ofrecer a Dios el sacrificio de la ausencia de su casa en ocasión tan memorable.

            A este niño, que llegaba a este mundo cuando todos los suyos andaban perseguidos; en momentos que la religión era atacada, las cruces proscritas y derribadas, se le impuso el nombre de: Cruz, en recuerdo de la Cruz que su familia defendía y su patria profanaba.

Una gotita más…

Estaba de Dios que siguiéramos pasando penas y sobresaltos; y aquella paz, por la que tanto suspirábamos, no nos era concedida todavía. El tercer día de nuestra estancia en Leiza, al volver de un paseo por el campo, recibimos de Pamplona un aviso por demás inquietante: la casa contigua a la de los hermanos estaba ardiendo[2]. Carmen, en su delicado estado, corría peligro de muerte entre el humo que hasta su cuarto subía, y sobre todo,  ante el riesgo de que se propagase el incendio.

Dado lo crítico y alarmante de la situación, los médicos decidieron meterla en una ambulancia con el niño y llevarla a San Sebastián a casa de su madre..."

Al comienzo de este incendio volvió a congregarse primeramente un grupo de radicales izquierdistas que comenzaron de nuevo a insultar y vociferar contra los Baleztena. Enseguida en esta ocasión se formó otro grupo de personas indignadas que intentaban sofocar el fuego. En medio de este tumulto, cuando montaban a Carmen y su recién nacido hijo en la ambulancia, arreciaron los insultos de una parte de los congregados, ante lo cual ella les dijo con su hijo en brazos: 
- ¿No queríais Baleztenas?, pues, ¡aquí tenéis uno más!.

"...Ignacio salió precipitadamente a esperarla en la carretera de Lecumberri y a conocer a su hijo en aquella extraordinaria circunstancia.

Este nuevo incendio indignó y congregó al público, y fue sofocado inmediatamente. Se dijo que fue casual, pero no todos lo quisieron creer. Tampoco en esta adversidad nos abandonó la Providencia. Carmen hizo un viaje buenísimo y sin tener ninguna complicación. Ya repuesta del todo, quiso salir el primer día a ofrecer a Cruz Mari al Santo Cristo de Lezo, el día tres de Mayo, fiesta de la Instauración de la Santa Cruz.

El rey Alfonso Carlos (q.D.g.) había mandado que sus súbditos festejaran especialmente en aquel año de persecución religiosa, la fiesta de la Santa Cruz. Ignacio y Carmen cumplieron el real mandato ofreciendo un cristiano a Dios, un ciudadano a la Patria y un futuro requeté al Rey..."

"Cruz Mari Baleztena, el hijo del fuego"

[1] Enre todos estos percances se adelanto varias semanas el parto de Carmen, la mujer de Ignacio Baleztena, que dio a luz en su casa de la Calle San Ignacio (Actual Fernández Arenas) a su cuarto hijo, mientras el padre estaba desterrado en Leiza.
[2] Se refiere a la casa contigua a la que vivían Ignacio y Carmen en de la Calle San Ignacio (Actual Fernández Arenas)

2 comentarios:

  1. Y la Diputación de aquel entonces,¿qué decía y hacía ante estos atropellos?¿Qué decían y hacían los diputados ante todas estas tropelías?¿Qué decían y hacían las autoridades municipales,si es que podían hacer algo?¿O es que había entonces tantos conflictos sociales y políticos que las autoridades no podían llegar a todo?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. He esperado a hoy para contestar esta pregunta con una entrada competa. En ella señalo cómo tuvo que ser la sociedad civil la que se articuló para protestar por lo sucedido ante la pasividad de las instituciones, incluidas las forales y las municipales. Para ver como respondió la sociedad civil ir a http://premindeiruna.blogspot.com/2012/01/reacciones-tras-el-asalto-y-quema-de.html
      Gracias por tu acertada aportación.
      Un cordial saludo
      Javier Baleztena

      Eliminar