Páginas

sábado, 21 de junio de 2014

Semana grandiosa. El Rey en las calles.

Querido lector, no quería dejar escapar los acontecimientos de esta semana en los que tanto hubiera disfrutado el aitacho, sin escribir esta reseña. Porque el pasado jueves el Rey se paseo por la calle, cerca de su querido pueblo. Fue impresionante. Miles de personas se agolpaban para verlo pasar. Calles engalanadas con flores, banderas, reposteros y sobre todo el amor y respeto de las gentes.

Como ya te habrás imaginado estoy hablando de la celebración del Corpus Christi, que se celebró como todos los años el pasado jueves. El Rey de reyes salió a las calles en muchas ciudades de España: Toledo, Sevilla... y mañana lo disfrutaremos en ciudades y pueblos de Navarra y otros lugares de España al trasladarse la festividad al domingo. Allí estaremos.

Y el aitacho, adorador del Santísimo Sacramento del Altar, naturalmente también escribió sobre esta festividad en Pamplona:



"PROCESION DEL CORPUS
Recuerdos de antaño


Al llegar el día solemne del Corpus Christi, los supervivientes decimonónicos recordamos con nostalgia aquellos valiosos tapices que adornaban las fachadas de algunas casas señoriales de Pamplona. Pocos quedaban, pero sí los suficientes para que los que hoy no tenemos ni canas que peinar, les dediquemos un sentido recuerdo.

            La casa que por más tiempo honró su fachada engalanándola en honor de la Sagrada Eucaristía, fue la de Zurbano, en la calle de la Zapatería de la Población. Pero hace muy pocos años, aquellos valiosos tapices fueron empaquetados con destino a una villa guipuzcoana.

            Todavía, cuando los viejos pamploneses acompañamos a algún forastero por las calles de la ciudad, le hacemos notar, cómo debajo de los balcones de los primeros pisos, y a todo lo largo de las fachadas, se ven unos ganchos destinados a sostener las preciosas colgaduras de antaño.

La desaparición de estas joyas se inició ya hace muchos años, como se puede ver por la interesante “Revista” que con motivo de la festividad del Corpus del año 1895 escribió en el “Eco de Navarra” el ameno escritor pamplonés D. Nicanor Espoz.

“La procesión del Corpus notable como siempre y con la solemnidad que acostumbra hacerla un pueblo tan católico como lo es Pamplona.

Yo recorrí la carrera, al igual que cuando era muchacho, a ver los tapices.

Pero ¡ay! aquellos tapices que se guardaban en los desvanes ignorando su mérito: aquellos tapices que olían a sombrío; aquellos tapices que a las seis de la mañana se bajaban a la calle a fin de quitarles el polvo a fuerza de palos, para después colgarlos cubriendo las puertas de las casas, ya no existen.

Vino el “tío sabio” y compró los primeros tapices por cuatro cuartos.

Y era natural. Aquella tela rollada no hacía más que estorbo en la guadilla.

Luego se pagaron más caros, y después se pagaron mucho, pero para entonces se habían vendido casi todos.

¡Quedan tan pocos!

Sólo en contadas casas “fuertes” pude ver algún ejemplar de esos preciosos tejidos que antes se hallaban cubriendo las entradas de “todos” los edificios de la carrera.

De manera que… ¡adiós! Tapices.”

No eran sólo los tapices lo que don Nicanor añoraba, sino como buen pamplonica, y hombre de buen apetito, empezaba a echar de menos otra buena costumbre, que nosotros también alcanzamos a conocer.

“Y no es lo malo que nos hayamos despedido de los tapices, sino que nos hemos despedido también de los almuerzos, de aquellos almuerzos con que se obsequiaba a parientes y amigos en las casas donde iban a ver la procesión clásicos compuestos de chorizo cocido espolvoreado de azúcar, y de magras cuyo aroma al freírlas se mezclaba con el incienso y hacía cosquillas en la nariz insubordinando al estómago.

Ya no hay “ley” en Navarra; la ciencia económica se ha divulgado entre todas las clases sociales y a cambio de tener unas pesetas más… adiós tapices, adiós jamón y chorizo con azúcar.

Todo pasa.

Y qué razón tenía Chateaubriand cuando dijo: “La hermosura de Basan Carmelo se borra y las flores del Líbano se marchitan; sólo tú iglesia ostentas imperecedera hermosura”.

De la mañana del “Corpus Christi” en Pamplona sólo queda la procesión, los solemnísimos cultos que hace la iglesia.

La clase de paisanos ya no hace nada; la “hermosura de aquellas costumbres se ha borrado y el hábito de convidar a los amigos se ha “marchitado”.

Y en verdad os digo, que lo que digo lo digo por ciencia propia.

Nadie me llamó para que subiese.

Martes 18 de junio de 1895”.

Si resucitase la antigua costumbre de esos almuerzos a base de chorizo cocido y azucarado, se notaría en ellos la ausencia absoluta del "sexo fuerte"; pues hoy, todo él, se puede decir que sin más excepción que los enfermos, tiene a gran gala y honor figurar en las filas del triunfal paseo de Jesús Sacramentado por las calles de su Ciudad de Pamplona.

En esto, aun los más gruñones partidarios del pasado, tienen que convenir y confesar que no siempre cualquier tiempo pasado fue mejor.


Tiburcio de Okabío"

Diario de Navarra 9/6/1955

Procesión del Corpus en Pamplona

Lo cierto y verdad es que mientras algunos advenedizos se esmeran en suprimir misas, "tedeums" y cualquier símbolo que huela a religión por si se contaminan, el sabio pueblo fiel lo mira con indiferencia y erre que erre vuelve a llenar por cientos de miles, repartidos por todas las poblaciones de España, las engalanadas calles para honrar tras la Misa a Jesús Sacramentado, Rey de reyes (y de jefes de estado de cualquier tipo) de forma gozosa y popular. Naturalmente también aquí en Navarra.

Procesión del Corpus en Leiza
El Santísimo honrado también en las cumbres (Aralar). Del libro Romerías Navarras de Dolores Baleztena y M Astiz
Pues eso, feliz día del Corpus, y en la próxima entrada si Dios quiere retomo la biografía del aitacho.

miércoles, 11 de junio de 2014

La Pascua y San Miguel de Aralar

Querido lector, el pasado domingo, con la celebración de Pentecostés finaliza la Pascua, y precisamente en Navarra uno de los acontecimientos que se producen durante este tiempo es la visita del angelico, San Miguel de Aralar a quien tanta devoción tenía el aitacho, por las distintas localidades de nuestra geografía foral. En un blog de Premín de Iruña no podíamos dejar de hacer una mencióna este acontecimiento.

                                                                  Nor Jaungoikoa Bezala?. Iñor Jaungoikoa Bezala.                                                    Grabado de Miguel Ángel Astiz, del libro Romerías Navarras escrito por Dolores Baleztena


Comenzábamos la Pascua con la absurda polémica de si se recibía a San Miguel de Aralar en el Parlamento o era un visitante non grato para nuestros ilustrados y sesudos políticos, tan representantes ellos del sentir navarro, y debía quedarse en la puerta llamando.

Precisamente fue Ignacio Baleztena quien instituyó la tradición de la visita del ángel a la Diputación (pinchar aquí para ver el origen) en una época en que estos dramas tan ilustrados ni se planteaban al sentido común del pueblo. Allí estaban todos encantados recibiéndole, los liberales, conservadores, carlistas y nacionalistas. Hoy en una sociedad mucho más libre y avanzada algunos iluminados pretenden vetar, prohibir e impedir la visita del angelíco. ¡Viva la libertad!, rompiendo con las ideas y tradiciones de generaciones y generaciones de navarros, entre ellos muchos padres y abuelos de los anti angelico.

Total San Miel llegó, como siempre, y el que quiso fue a recibirle. El que no se quedó en casa y se lo perdió. Se acabó la polémica.

Aparte de historietas politiqueras de nuestros parlamentarios, que así se desviven con nuestros dineros por las auténticas necesidades actuales del pueblo, la Pascua en Pamplona se relaciona con la llegada de San Miguel, que hace una peregrinación inversa: en vez de ir nosotros a su santuario, viene él a nuestros pueblos. En Pamplona estuvieron los chistularis, los apezas, el angelico de la Meca, y cantidad de irunshemes rezándole y cantándole. Y se volvió a cumplir la tradición que mi padre Ignacio describió en una cancioncica, como él siempre solía hacer:

La canción a San Miguel de Aralar de Ignacio Baleztena

La letra de la canción a San Miguel de Aralar de Ignacio Baleztena, publicada en el libro Romerías Navarras de la tía Lola (su hermana)
Con todo esto vamos a disfrutar de algunas imágenes de nuestro San Miel, de época de cuando vivía mi padre:

Los diputados forales de todas las tendencias reciben a San Miguel con todo boato y honores cuando Ignacio Baleztena era diputado e instituyó esta costumbre en 1925

Recibimiento de San Miguel en la Taconera. El aingeru del Meca a erribirle va... (Del libro Romerías Navarras de Dolores Baleztena y José M Astiz)

San Miguel de Aralar en el entorno de Osquía (Del libro Romerías Navarras de Dolores Baleztena y M Ángel Astiz)

San Miguel de Aralar entrando en una iglesia de la Barranca (Del libro Romerías Navarras de Dolores Baleztena y M Ángel Astiz)
San Miguel de Aralar En Leiza escoltado por requetés del pueblo
Otra foto de San Miguel de Aralar por Leiza


Santuario de San Miguel de Aralar tras su incendio de 1942 (Del libro Romerías Navarras de Dolores Baleztena y M Ángel Astiz)

Placa en honor de San Miguel de Aralar en la puerta de Larrea, casa de la familia Baleztena en Leiza

Y perdón por el protagonismo pero no me he podido resistir a poner esta foto mía con San Miguel

Espero que todos los devotos de nuestro querido San Miel hayáis disfrutado de esta entrada y cogido fuerzas para seguir la biografía del aitacho en las próxias entradas si Dios quiere.

lunes, 9 de junio de 2014

Ignacio Baleztena con el Muthiko Alaiak en Bayona



Querido lector, retomamos la biografía del aitacho, que como habíamos dicho, durante estos años intensificó sus actividades culturales y folclóricas.

Era por la década de los 40 cuando con el grupo de danzas del Muthiko Alaiak acudió a una exhibición en Bayona. No es porque lo fundará él, pero lo cierto es que posiblemente era el mejor grupo de danzas de los que había en aquel momento.

Comenzó la exhibición en el Parque de los Deportes de la ciudad gala y todo transcurría normalmente hasta que le tocó el turno a los danzaris del Muthiko. Salieron a bailar como lo hacían habitualmente en estas ocasiones con las banderas de Navarra, de España y del grupo de danzas. Entonces dos individuos que hoy se autodenominarían abertzales se interpusieron y les intentaron obligar a que salieran a bailar sin la bandera española. Se organizó un pequeño rifi rafe ya que los muthikos estaban dispuestos a  sacarla como fuera pasando por encima de los dos sujetos si hacía falta. Los reventadores hablaban en español y mi padre les reprendió en su querida lengua vasca, pero como era de esperar no entendían ni “bai” en euskera, y por lo que se ve tampoco eran unos ases del francés. Como el ambiente se iba tensando, para evitar que aquello acabara a palos, muy dignamente los muthikos decidieron que si no salían con todas sus banderas ellos no participaban y con gran dignidad salieron del recinto ante el estupor de los espectadores que no entendían que pasaba.

Entonces comenzaron una karrikadantza por todo Bayona luciéndose con sus danzas haciendo las delicias de los habitantes de dicha ciudad que los felicitaron y aplaudieron profusamente en los glacis y por las calles de la misma.

Para finalizar la jornada acudieron a una recepción en el “Farnié” y delante del Monumento a los muertos por la patria durante la primera guerra mundial rezaron una oración y realizaron un baile de honor.



El grupo de danzas de Muthiko Alaiak en Bayona en los años 40

Así finalizó esa memorable jornada que tuvo su repercusión mediática al día siguiente, como puede verse en esta cuartilla que mi padre tradujo de la prensa local de Bayona y conserva entre sus archivos.

Traducción realizada por Ignacio Baleztena de la reseña que salió en la prensa local de Bayona del incidente que sufrió el Muthiko Alaiak en esa ciudad.

El Muthiko siguió haciendo giras por Francia en más ocasiones y esto hace que no pueda resistirme a poner fotos familiares de los hijos de Ignacio Baleztena, incluido este pobre ex dantzari que escribe, en Francia en 1970.

Los hijos de Ignacio Baleztena con el grupo de danzas del Muthiko Alaiak en 1970. Javier (el mendas) con la bandera del Muthiko e Ignacio con la de Navarra

 
Y mi hermano Ignacio (Tatito) llevaba con orgullo la bandera de Navarra, con la cual bailaban los dantzarisdel Muthiko Alaiak en 1970
 
Javier Baleztena, cosa buena, dantzari con la bandera del Muthiko en 1970


 Y cambiando de tercio, como ayer fue Pentecostés, festividad con la que finaliza la Pascua, estos días escribiré sobre… lo que veremos en la próxima entrada si Dios quiere

jueves, 5 de junio de 2014

Adios Reina del Cielo

Adiós, Reina del cielo, Madre del Salvador.
Adiós, oh Madre mía. Adiós, adiós, adiós.

            Querido lector, ha finalizado mayo, el mes de la Virgen y de las flores. De todos es conocido tras ir leyendo el blog la gran devoción que el aitacho sentía por la Santísima Virgen María, como viene demostrado por sus múltiples actividades en su honor: la creación de la Orden de la Virgen del Chaparro, sus diversos y variados escritos relacionados con las distintas advocaciones de Nuestra Señora que se reparten por todo Navarra, sus romerías…Y hablando de romerías hay un libro escrito por su hermana la tía Lola que es especialmente curioso y se llama precisamente "Romerías Navarras". En el se ve la gran devoción a la Virgen que los navarros hemos ido recibiendo de generación y generación y así continua, con el peregrinar de los pueblos de nuestra querida tierra a los bonitos santuarios que albergan las distintas advocaciones.
Portada del libro Romerías Navarras, escrito por Dolores Baleztena, hermana de Ignacio, y con ilustraciones de Miguel Ángel Astiz
Pues bien, los amantes de la romería de la Virgen de Ujué, a la que tantas veces peregrino mi padre Ignacio vamos a disfrutar con este testimonio gráfico.

ROMERÍAS A UJUE HACE 100 AÑOS (APROXIMADAMENTE)

Ignacio Baleztena Ascárate romero en Ujué

La Cruz del Perdón

Santuario de la Virgen de Ujué
Dolores Baleztena, tía Lola, rodeada de las gentes de Ujué
ROMERÍA DE UJUÉ HACE MEDIO SIGLO (APROXIMADAMENTE)

Crucero de Ujué
Las Baleztena en Ujué: Abajo a la derecha Roshari Jaurrieta Baleztena, ahijada de Ignacio Baleztena, en segunda fila tía Silvia, tía Ángeles y tía Luisa. Detrás tía Lola y tía Mª Ysabel (hermanas de Ignacio Baleztena).
Mª Ysabel y Lola Baleztena en Ujué
Descanso de los romeros
Con las cruces a la izquierda Cruz Baleztena, hijo de Ignacio y a la derecha su primo Ignacito Jaurrieta Baleztena
En el crucero
Cruz Mª Baleztena Abarrategui, hijo de Ignacio, e Ignacito Jaurrieta Baleztena, romeros a Ujué
Ignacito Jaurrieta Baleztena hablando con uno de la cuadrilla del "Templau" (Florencio Aoiz padre, conocido carlista de Tafalla que por "echau palante" recibía ese nombre)
Romeros a Ujué
Hace 100 años, hace 50 y en la actualidad generaciones y generaciones de navarros acudimos al castillo / santuario de la Virgen a implorar a nuestra Madre bendita de Ujué que sea de nuestra Ribera refugio de ardiente fé, como dice la canción.
Si has disfrutado de esta entrada agradécelo a Victor Sierra Sesumaga que me ha ayudado a digitalizar estos archivos fotográficos tan interesantes.
Y ahora sí, aunque todavía tenga el cerebro aplastado y la sesera con más cardenales que un concilio, me propongo seguir con el blog, con la biografía del aitacho y con lo que sea menester. Mientras tanto para ver como se celebraban las flores a María en vida del aitacho puedes pinchar aquí y yo creo que puedes pasar un rato entretenido. Y así despedimos Mayo, el mes de María para comenzar Junio, el del Sagrado Corazón. Sagrado Corazón de Jesús ruega por nosotros. Hasta la próxima entrada si Dios quiere.